TTE145

Vulnerabilidad de acuíferos de la subcuenca del Río Maullín…

Exploración minera y petrolera

Operación de campos de petróleo; minas metalíferas.

Algunas minas, cantera de materiales inertes.

*Industrias tipo 1 : Carpintería, fábrica de alimentos y bebidas, destilería de alcohol y azúcar, procesamiento de materiales no metálicos. Industrias tipo 2 : Fábrica de caucho, pulpa y papel, textiles, artículos eléctricos, fertilizantes, detergentes y jabones. Industrias tipo 3 : Talleres mecánicos, refinería de gas y petróleo, manufactura de pesticidas, plásticos, productos farmacéuticos y químicos, curtidurías, fábrica de artículos electrónicos, procesamiento de metal.

Tabla 3. Fuentes de contaminación puntuales. Protección de la calidad del agua subterránea. Guía para empresas de aguas, autoridades municipales y agencias ambientales. Extraído de Foster et al , 2002.

Para este estudio las fuentes contaminantes se agruparon según lo expuesto en Figueroa (2010) según el método POSH de Foster et al. , (2002), las cuales son fuentes contaminantes urbanas, vías de transporte y actividad industrial. La actividad agrícola se ha descartado ya que esta se encuentra limitada al área rural principalmente. De esta forma se generaron cartografías con la ubicación de actividades potencialmente generadoras de contaminantes, y se ha asociado la presencia de ciertas sustancias contaminantes con la ubicación de actividades en el área de estudio como lo establece el método utilizado (POSH). Es por esto, que la estimación de la carga hidráulica varía según la información que se pudo recabar para este estudio respecto a las actividades consideradas. Una vez obtenidos los niveles de carga contaminante, para las actividades anteriormente mencionadas, y habiendo establecido los niveles de vulnerabilidad en el área de estudio, se procedió a delimitar el riesgo potencial de contaminación asociado a cada actividad, superpuesto con la ubicación de los humedales. Para esto se ha utilizado la matriz de doble entrada presentada en Figueroa (2010), la cual entrega el nivel de riesgo potencial generado por cada una de las actividades (Figura 9).

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