TTE269
aquí hemos incorporado, en tanto relación capital/trabajo ha generado una importante
transformación en el estilo de vida entre ellos y, por ende, en cuanto trabajos concretos
desempeñados, una diferenciación específica. Lo que queremos decir aquí es que las
diversidades en las economías domesticas comienzan a acrecentarse y acentuarse debido a la
diferenciación en las trayectorias laborales biográficas que los habitantes comienzan a
producir producto del asalariamiento y el multitrabajo.
La premisa principal de los procesos de asalarización, en cuanto los productores son
despojados o se distancian de los medios de producción, es que de forma coercitiva son
transformados en vendedores de su fuerza de trabajo; hemos pesquisado que en Caillin este
movimiento ha sido multifactorial y al interior de la reducción tiene su origen en las décadas
de 1970-1980. De este modo, los miembros de las UDs mayormente proletarizadas observan
su existencia muchas veces como enajenada, pues el desprendimiento de la mercancía que
venden, su fuerza de trabajo, no es posible de escindirse de la corporeidad (Osorio, 2012)
que les permite, en efecto, existir y reproducirse, por tanto, la energía empleada en el trabajo no es susceptible de ser recuperada como tampoco el tiempo. 140 De este modo, la transacción
de la fuerza de trabajo implica una enajenación de la vida misma de estas personas, así ponen
a disposición del capital su propia existencia, su energía, sus cuerpos, el tiempo irreversible.
En este sentido, nuestra investigación ha identificado una importante paradoja. Tengamos en
cuenta la siguiente suposición del capital: el tiempo luego de terminada la jornada laboral le
permite al trabajador recuperar, virtualmente, el dominio de su existencia (Osorio, 2012). Sin
embargo, “ese reapoderamiento solo constituye un pequeño paréntesis dentro de un proceso
que obliga al productor a tener que volver a presentarse durante toda su vida útil al mercado
como vendedor de su fuerza vital” (Osorio, 2012:89). En Caillin , este tiempo de reposición
que reclama el propio capital , es empleado, a duras penas, para la realización de horticultura
de autoconsumo, o el cuidado de animales y/o aves en pequeña escala; de este modo, el
ilusorio tiempo de reposición que supone el capital, es utilizado por estos habitantes como
140 “en la venta y compra de la fuerza de trabajo se hace presente un hecho paradojal: las capacidades físicas y creativas que permiten trabajar no son ajenas a la corporeidad viva del trabajador . Esto implica que no es posible separar materialmente la fuerza de trabajo de la existencia misma de su propietario. No hay una distinción ontológica entre una y otra.” (Osorio, 2012:8 8).
144
Made with FlippingBook Digital Publishing Software