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Petro logía e implicancias tectónicas de las rocas ígneas del antearco…

convergencia toma un rumbo E-O desde los 26 Ma (Oligoceno). Desde la primera etapa del

Ciclo Andino (~200 Ma) la configuración tectónica evoluciona, primero con la subducción

de la placa Aluk bajo la placa Sudamericana, generando que entre los 97 y 50 Ma se

desarrolle la dorsal Aluk-Farallón. Esta dorsal divide la placa Aluk en las placas Pacífico

por el este y Farallón por el oeste, donde, la subducción de esta última es oblicua hasta el

momento en que ocurre su quiebre (26 Ma) y surge la nueva organización tectónica con las

placas Nazca y Cocos. Este quiebre de la placa Farallón, produce en el antearco alzamiento

y deformación extensional, compresional y fallamiento de rumbo (Charrier et al. 2007).

Los eventos de deformación regional durante el Pérmico superior – Triásico han

sido ampliamente registrados en la Cordillera de la Costa (Munizaga et al. , 1988; Hervé,

1988; Duhart et al., 2001). En Chiloé Insular diversos lineamientos satelitales en las rocas

metamórficas obtenidos con teledetección se han interpretado como fallas, pero su

cinemática es desconocida debido a que la espesa cobertura vegetal y difícil acceso no

permiten su comprobación en terreno (Arenas y Duhart, 2003). Localmente se han

observado contactos por falla en el Cerro Huaihuen de Ancud, fallas inversas en areniscas

finas del sector Chaiguao Chilcol en Quellón y fallas inferidas en Playa Arena Gruesa

(Ancud Urbano), Gamboa Alto y Bajo (Castro Urbano) y Chepu.

En el área de estudio (Figura 4) los principales lineamientos caracterizados

genéricamente como fallas (Arenas y Duhart, 2003) corresponden a trazas que afectan a

rocas del basamento (CMBM) en procesos previos al ciclo Andino (Zona de Fallas del

Basamento, ZFB) y a secuencias sedimentarias pliocenas-pleistocenas. En el caso de la

ZFB, las trazas de falla con rumbo NO se extienden por más de 70 km entre el denominado

Chiloé Continental (que contempla la actual provincia de Palena, región de Los Lagos) y

Chiloé Insular, asumiéndose según Aguilera et al. (2014) como extensiones laterales del

SFLO. Las trazas menores de las fallas relacionadas a procesos mesozoicos y cenozoicos

posteriores a la deformación del basamento metamórfico, corresponden a tres dominios

principales: un primer dominio NO-SE, que estaría en correspondencia con la ZFB; un

segundo dominio de rumbo N-S afectando a rocas del CMBM y unidades fanerozoicas, y

un tercer dominio de rumbo E-O afectando en menor medida a todas las unidades

mencionadas anteriormente.

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