Gobernanza ambiental

Gobernanza en torno a los bosques nativos

calidad de agua, turismo y control de la erosión, aparte de la pro visión de madera y fibra. Respecto del manejo de los bosques, parece ser que la conducta de los usuarios del sistema para manejarlos no ha variado con los años. Pero sí lo ha hecho la conducta creciente de la ciudadanía por la obtención de bienes y servicios del bosque que van mucho más allá que los productos madereros. Nuestra normativa (por ejemplo, la Ley 20.283 sobre Fomento y Recuperación de Bosque Nativo y Formaciones Xerofíticas) no recoge tal demanda en su gestión, estando en el espíritu de la misma; debemos hacer esfuerzos para estar en consonancia con la sociedad. Para que esta normativa de sarrolle acciones que tributen y que propendan a la conservación de la biodiversidad, la educación ambiental es la forma con la cual se visualiza el espíritu de la normativa. Desde el punto de vista am biental y conservacionista, no es suficiente que los turistas disfruten y aprecien la belleza de los paisajes y la vegetación en senderos, sino que es necesario además que ellos valoren los recursos existentes en el lugar. Para lograr las expectativas de concientización de los visitantes y de los que diseñan, es necesaria la educación ambiental de una forma interactiva que permita a las personas relacionarse directamente con el entorno, y durante esa interacción logren co nocer y valorar los recursos existentes. Para ello resulta relevante, por ejemplo, incorporar al Fondo de Investigación de Bosque Na tivo (Ley 20.283) una línea de investigación que dé cuenta de la relevancia del senderismo, una línea de base que permita recoger la realidad del lugar, su potencialidad y sus valores ecosistémicos. Así, la bonificación de senderos no solo redunda en su implementación, sino que además genera conocimiento local que maximiza el espíritu de conservación de la ley. Según Sancho (2006), el turismo debe ser planeado de una manera sustentable, teniendo en cuenta la protección del medio ambiente. En este sentido, el ecoturismo basado en la educación ambiental es importante. El turismo ecológico o ecoturismo (Millán, 2001) ayuda a educar al visitante para que este valore y respete los recursos de un área (Drumm y Moore, 2002). Una alternativa para

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