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En el año 1881, se inicia la ocupación definitiva del territorio, con la presencia

del ministro del Interior, Manuel Recabarren, tras lo cual se va estrechando aún

más el territorio de los mapuches, se va a fundar una serie de siete fuertes:

“uno en Collico, que sería el ultimo, uno sobre el río Quino, otro sobre el Quillem,

tres sobre el Cautín, i séptimo el poniente de Ñielol, dándose la mano, por medio

de fortines, en Cautín, Traiguén i Lumaco. Cada uno de ellos debía tener

cuarteles, galpones para el acopio de víveres y forraje, caballerizas i otras

dependencias con capacidad para alojar cómodamente a 300 hombres i 50 caballos” 63 .

Recabarren, mostró una capacidad de organizador bastante impresionante.

Mandó a pedir todo tipo de herramientas a Concepción, busco proveedores a los

que pagaba con vales y pagares del Estado, movilizó a toda la población en

función de su meta:

“Establecer en el corazón mismo de las tribus ho stiles repartidas entre la

mencionada cordillera del Ñielol y la de los Andes, de modo que estando entre

ellos mismos y teniéndoles siempre bajo nuestra inmediata inspección i a nuestro

alcance, quedáramos en situación de impedir sus movimientos o de perseguirlos

fácilmente, si habiendo podido burlar nuestra vigilancia, traspasaban las líneas

actuales i llegaban a cometer depredaciones en el territorio ocupado por la población civilizada” 64 .

Finalizando con la fundación de Temuco a orillas del río Cautín, cuyo epilogo

será la ocupación de Villarrica el 1° de enero de 1883. Las tierras, ya estaban

ocupadas, trazadas y delineadas, solo había que habitarlas.

63 Recabarren. Informe del Ministerio del Interior, 1881. Pág. 225. Citado en Bengoa, José. “Historia del pueblo mapuche”. Pág. 280. 64 Recabarren. Informe del Ministerio del Interior, 1881. Pág. 225. Citado en Bengoa, José. “Historia del pueblo mapuche”. Pág. 280.

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