TTE286

Análisis de deformación (2015- 2017), ligado a la ocurrencia de remociones…

2

MARCO TEÓRICO

2.1 E FECTOS DEL R ETROCESO G LACIAR

Kos et al., 2016 menciona que las tasas a las que se deforma una pendiente rocosa,

en respuesta a la pérdida de hielo de los glaciares, está determinada en parte por la morfología

del valle preexistente. Además, añade en que la respuesta de la pendiente al retroceso glaciar

es rápida (ocurre dentro de una década) una vez que la reducción de la altura del hielo del

glaciar alcanza un umbral crítico.

Bovis (1982) sugiere que la inestabilidad del valle causada por la erosión glacial

puede conducir a un abultamiento elástico de la ladera, debido a la diferencia de densidad

entre el hielo y roca. Por su parte, McColl & Davies (2012) mencionan que un glaciar puede

evitar el rápido colapso de la pared del valle, lo cual se debe a la fuerza elástica que realiza

el hielo a altas velocidades de deformación. Sin embargo, no puede evitar la deformación

gradual y permanente.

A medida que los glaciares continúan adelgazando, es probable que las laderas se

muevan más rápido y más lejos; eventualmente pueden colapsar catastróficamente,

especialmente si la superficie de falla queda expuesta por encima de la superficie del hielo.

Cabe mencionar, que esto podría suceder antes de que el final del glaciar haya retrocedido

más allá de la pendiente (McColl & Davies, 2012). Sumado a lo anterior, se debe considerar

que el glaciar desempeña un papel fundamental en la desestabilización de las laderas, esto se

debe a la socavación y el empinamiento de las laderas que produce la erosión glacial, esto

contribuye al inicio de los movimientos en las laderas de los valles (McColl & Davies, 2012).

Por consiguiente, se asume que el destensado y la liberación de tensiones glaciales causan

desestabilización de las laderas y aumentan la actividad del movimiento durante el proceso

de desglaciación, se debe tener en cuenta que el adelgazamiento y el retroceso de los glaciares

reducirán las presiones del hielo criostático que actúa sobre las pendientes, lo que en

consecuencia reducirá el soporte de las pendientes y, por lo tanto, aumentará la tasa de

movimiento de las fallas existentes o permitirá que se desarrollen nuevas (McColl & Davies,

2012).

22

Made with FlippingBook - professional solution for displaying marketing and sales documents online