TTE237

Latinoamérica disponen, en su repertorio topográfico de un término específico para

designar a esos lugares estigmatizados y situados en lo más bajo del sistema

jerárquico de los sitios que componen una metrópolis”. (ibid.:113).

En particular, la historia de los campamentos en Chile está estrechamente vinculada

a las reivindicaciones sociales de los movimientos de pobladores. Durante la década

de 1950’ y propiciado por la ausencia de un programa adecuado que garantizara la

vivienda popular, los partidos obreros inician movilizaciones de ocupación ilegal de

terrenos y la formación de ‘callampas’ (Castells, 1973). Manuel Castells señala que

ante el fenómeno migratorio campo-ciudad saturó la débil estructura habitacional de

las ciudades, principalmente de Santiago, generando una forma urbana deteriorada

espaciales, de salubridad y acceso a servicios.

Cómo resultado de este fenómeno surge el “conventillo”, la “callampa” y la “población”

(Castells, 1973). Para los intereses de esta investigación, es importante señalar que,

la emergencia de los “campamentos”, en términos de Castells, se caracteriza no sólo

por ser un asentamiento urbano producto de los problemas de habitabilidad

acarreados de la década de 1950’, sino también por la organización y contenido

político de sus habitantes. En este sent ido, “la denominación de ´campamento´ no

sólo conlleva un sentido de asentamiento precario sino también uno de lucha”.

(Castells [1973] en Benavides y Morales, 1982:10). De igual manera, estos espacios

son conocidos “internamente y desde afuera como "las zonas de no derecho”, “los

sectores en problemas”, los barrios “prohibidos" o “salvajes” de la ciudad, como

territorios de privación y abandono a los que se debe temer, de los que hay que huir

y es necesario evitar pues constituyen focos de violencia, vicio s y disolución social”

(Wacquant, 2007: 13); sin embargo, los campamentos también son espacios de

esperanza y anhelo de vida digna, aspectos que se analizaran a partir de la

experiencia de los pobladores que transitan desde el establecimiento de un

campame nto hasta la constitución del “sueño de la casa propia” como culminación de

del esfuerzo colectivo expresado en movimientos de pobladores.

En esta etapa se desarrollan “nuevas identidades en la ciudad; una identidad laboral

asociada a la actividad de las industrias, una cultura obrera que se realizaba entre el

espacio de trabajo y el barrio donde se habitaba, un núcleo familiar propietario de un

sitio en la ciudad, una identidad barrial que se auto construía” (Santibáñez, 2004:718).

34

Made with FlippingBook Learn more on our blog